¿Hasta dónde nos afecta la memoria muscular?

Los atletas sin duda ya habrán escuchado o incluso estar familiarizado con el tema de la memoria muscular. Donde nuestros músculos pueden aprender algunos ejercicios, y realizarlos con perfección después de práctica. El proceso detrás de esto no es nuevo, y ha habido mucha investigación en el tema de la memoria muscular, y cuánto en realidad nos confían en él en vez de simplemente utilizar nuestro cerebro.

Ha habido un debate sobre si existe memoria muscular en absoluto, e ¿qué tipo de limitaciones tendría? En la mayor parte de los casos, los científicos creen que el deporte memoria muscular, en realidad, no existe, pero que sí tienen un gran papel que jugar en muchas de las acciones que llevamos a cabo, incluso en el día a día. Si está haciendo un determinado ejercicio, por ejemplo. Definitivamente, la memoria muscular ha sido un tema candente en el deporte mundial durante miles de años, y sigue siendo objeto de un acalorado debate.

¿Qué es la memoria muscular?

Sinónimo de aprendizaje motor, memoria muscular es la capacidad de nuestros músculos para aprender cierta función motora, normalmente a través de la extrema repetición realizada a lo largo del tiempo. El efecto no es algo que se puede aprender en un corto periodo de tiempo, sino que nos obliga a realizar la misma acción un número de veces, y generalmente está vinculada con las actividades diarias. Esto se aplica no sólo a lo que hacemos cada día, sino también en los deportes y ejercicios que tomamos parte.

Si tomamos, por ejemplo, vídeos de gimnasia; podemos sentarnos y mirar como nos gusta, por tantas veces como se desee. No importa cuánto del vídeo que consumimos, y cómo llegamos a ser familiar con el video, simplemente no podemos poner los ejercicios en la práctica de la misma manera que lo hacen en el vídeo. Esto es porque nuestra memoria muscular y nuestra memoria visual sólo son parcialmente vinculada y la acción repetitiva de una actividad que es mucho más fácil para nuestros cerebros para aprender a lo largo del tiempo que lo podemos adquirir visualmente. Todo este proceso se reduce a dos tipos principales de memoria: a corto plazo y largo plazo. Memorizar como juega su equipo favorito por ejemplo, ayudará a hacer mejores apuestas en el fútbol en Argentina.

Memoria a corto plazo y memoria a largo plazo

La forma en que aprendemos a través de la memoria muscular se divide en los plazos que se repita una determinada acción, lo que significa que si hacemos sólo un par de veces en una fila, eso realmente no se mantendrá  como una memoria sólida, sino más bien como algo que estamos vagamente familiarizados y posiblemente podría repetir en el futuro.

Ya la memoria muscular a longo plazo requiere una acción continua durante un largo período de tiempo. Si queremos jugar un deporte, un juego específico sólo puede ser verdaderamente aprendido si practicamos durante un par de semanas a meses antes de que podamos comprender plenamente, y después de que no perdemos la capacidad de  jugar en cualquiera de los juegos.

La memoria muscular como una herramienta

La memoria muscular es una parte importante de nuestras vidas, y uno de los deportes que debemos saber aprovechar para conseguir su efecto máximo, lo que nos permite aprender algo con suficiente práctica, en lugar de estudiar.